Estoy separada pero aún casada, ¿y el dinero qué?


Estoy separada pero aún casada, ¿y el dinero qué?

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SARA STATHAS Facebook Twitter LinkedIn El problema


¿Permaneces casado o no? Esa fue la pregunta, y es una complicada. Hace casi seis años, 30 años después de casarse, Susan y Carter Hunnicutt de Milwaukee se separaron. Ha sido una separación


más que amigable. Susan, una escritora independiente, se queda en la mitad de la casa dúplex que tienen. Carter, un músico y excapitán de bomberos, vive en otro lugar y los ingresos de


alquiler de la otra parte del dúplex pagan por su nueva vivienda. Él le envía la mitad de su pensión mensual. Y ella sigue en su plan de salud económico y de alta calidad del departamento de


bomberos. “Hemos sido afortunados porque hemos podido cooperar”, dice Carter, de 61 años. Aun así, considera que su acuerdo es “una situación temporal”. Al ver que Carter tiene una novia y


sentir que la situación comienza a cambiar, Susan, de 63 años, se preocupa por cómo un divorcio podría afectar sus finanzas. ¿A dónde van a partir de aquí?


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El consejo


Desde 1990, aunque la tasa general de divorcios en el país ha estado disminuyendo, la tasa de divorcios entre las personas mayores de 50 años —un fenómeno a veces llamado “divorcio gris”— se


ha duplicado. El efecto es particularmente preocupante para las mujeres mayores. Según una investigación de I-Fen Lin y Susan Brown, profesoras de sociología de la Universidad Estatal de


Bowling Green, el nivel de vida de las mujeres mayores que se divorcian experimenta un descenso del 45%, en comparación con el descenso del 21% de los hombres de la misma edad. Brown señala


que el divorcio gris es distintivo, porque tiende a suceder después de los años de mayor ganancia de ambas partes. Pero es peor para las mujeres que “no ganaron tanto en promedio y tal vez


tienen antecedentes laborales interrumpidos o esporádicos por criar a sus hijos o cuidar de sus padres”, dice. Muchas terminan buscando empleo después de pasar años completamente fuera de la


fuerza laboral.