News Reader.info

Canvan Images / Getty Images Facebook Twitter LinkedIn

Nada puede levantar el ánimo y alegrar el alma como la música, especialmente cuando no puedes salir.

Cuando se estrenó el audio digital, el sonido era áspero y metálico, lo que arruinaba para muchos el nuevo formato y nos hacía extrañar nuestros viejos equipos de alta fidelidad.

Afortunadamente, ahora ya puedes recuperar ese sonido hi-fi, junto con la diversión. 

Membresía de AARP: $15 por tu primer año cuando te inscribes en la renovación automática.

Obtén acceso inmediato a productos exclusivos para socios y cientos de descuentos, una segunda membresía gratis y una suscripción a AARP The Magazine. Únete a AARP

Los formatos de música digital más nuevos y avanzados pueden capturar los tonos dulces en la voz de Brian Wilson, los sutiles trinos en el violín de Itzhak Perlman e incluso la nítida

brillantez en la trompeta de Miles Davis. Esto significa que lo más reciente en el llamado audio de alta resolución no solo es lo suficientemente bueno para el rock and roll, sino que además

es excelente para la música clásica o el jazz, y hace que los éxitos de antaño también suenen mucho mejor.

Otro beneficio es que no necesitas un sistema estéreo completamente nuevo para disfrutar de audio de alta resolución, aunque hay muchos componentes caros disponibles a la venta, si estos

fueran necesarios. Todo lo que necesitas para mejorar el entretenimiento en casa son uno o dos accesorios económicos, y acceso a un servicio de transmisión o descarga con audio de alta

resolución.

Entonces, ¿qué es el audio de alta resolución?

Originalmente, el formato de archivo de música digital MP3 surgió en la década de los 90 debido a la baja capacidad de almacenamiento en las computadoras y las lentas conexiones a internet

disponibles hace 25 años. Los archivos MP3 comprimieron la música para ahorrar espacio, pero en el proceso hicieron que esta sonara como si saliera de una lata de metal.

Actualmente, hay terabytes de almacenamiento disponibles en unidades que caben en la palma de tu mano, y las conexiones a internet de alta velocidad están disponibles incluso en teléfonos

inteligentes. Por lo tanto, hoy es fácil almacenar o transmitir canciones con calidad de CD (con un tamaño de muestra de 16 bits y una frecuencia de muestreo de 44.1 kilohercios, para los de

mentalidad más técnica).

Eso no está nada mal, pero la mayoría de nosotros recuerda que cuando se introdujeron los CD en la década de 1980, la calidad del sonido disminuyó. Muchos oyentes se quejaban de que los CD

sonaban fríos y que muchos discos sonaban peor que los originales de vinilo.

Supuestamente, el audio de alta resolución resuelve todas esas quejas sobre la calidad del sonido. Con un tamaño de muestra típico de 24 bits a 192 kHz, va varios pasos digitales más allá de

los CD, y brinda un rango más dinámico que revela detalles sutiles de sonido que serán, digamos, como música para tus oídos.