Cientos de familias plantan cara al calor en la bicicletada escolar de zaragoza: "venimos cada año"
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RÍOS DE BICICLETAS LLEGADOS DE NUMEROSOS BARRIOS DE LA CIUDAD HAN INUNDADO ESTE DOMINGO LA PLAZA DEL PILAR FRENTE A LA DELEGACIÓN DEL GOBIERNO. Allí sus conductores, pequeños y mayores, han
dedicado un rato a participar en una sesión de estiramiento para después colocarse sus dorsales, decorar -en algunos casos- sus bicicletas, repasar las normas de circulación y prepararse
para la acción. EL CALOR NO DABA TREGUA NI SIQUIERA A LAS DIEZ Y MEDIA DE LA MAÑANA, pero igualmente han sido muchos los que no han querido perderse la edición número 18 de la ya tradicional
Bicicletada Escolar. "ES UN DÍA DE FIESTA, PERO TAMBIÉN DE REIVINDICACIÓN", comentaban algunos de los padres presentes en el evento. CIENTOS DE PERSONAS HAN PARTICIPADO EN LA RUTA
DE ALREDEDOR DE 7 KILÓMETROS DESDE LA PLAZA DEL PILAR AL PARQUE DEL TÍO JORGE. Impulsada por la Oficina de Medio Ambiente, Acción Climática y Salud Pública del Ayuntamiento de Zaragoza,
dentro del Proyecto Stars, el objetivo de esta actividad es fomentar una movilidad sostenible, activa y autónoma para los escolares. "ES UN RECORRIDO LÚDICO FESTIVO EN EL QUE ESTAMOS
REIVINDICANDO EL PAPEL DE LA INFANCIA EN LAS CIUDADES Y EN EL ESPACIO PÚBLICO, TAMBIÉN EN BICICLETA", explicaba, atareada en organizar a lo distintos grupos participantes, Tamara Marzo,
técnica municipal. Te puede interesar La del año pasado fue una de las ediciones más multitudinarias, ya que contó con la participación de unas 750 personas. "ESTA VEZ EL CALOR IGUAL
TIRA PARA ATRÁS, PERO LA GENTE ESTÁ RESPONDIENDO BASTANTE BIEN", comentaba. Para hacer frente a las altas temperaturas, aunque es una recomendación que debe seguirse siempre, desde la
organización han hecho especial hincapié en la necesidad de llevar agua suficiente y también cuentan con una ambulancia medicalizada. "Nosotros solemos venir cada año, porque desde que
eran pequeños les hemos inculcado a los niños los beneficios de la bici", comentaba Natalia Pascual, vecina de Torrero, que había acudido junto a su pareja y sus hijos, Sheila e Iker.
Aunque al colegio no suelen ir en bicicleta porque viven "muy cerca", sí que hacen numerosas rutas en su tiempo libre, tanto en la ciudad como fuera de ella.