El ascenso del molina basket: un éxito con adn 100% murciano | la verdad
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Domingo, 25 de mayo 2025, 22:40 Comenta Compartir «Nunca fue el objetivo», valora todavía de resaca emocional Carles Miñana, entrenador del Sercomosa Molina, menos de 24 horas después de
hacer ascender a su equipo a la Segunda FEB y a minutos de ser recibido por unas 200 personas a la llegada del autobús de su equipo a Molina de Segura. «Pero avanza la temporada, ves que lo
vas consiguiendo», cuenta Miñana, «y en el viaje a Gijón te preguntas si serás competitivo, pero el equipo siempre responde». Es el reconocimiento de un entrenador a sus jugadores, a una
plantilla integrada al 100% por jugadores nacidos o criados en la Región de Murcia. «No tenemos la mejor plantilla, pero eso nos ha hecho estar más unidos y dar más de nosotros en los
momentos clave». Quien está al otro lado del teléfono ahora es Javi Piqueras, ayudante de Miñana desde que hace dos años diera un paso al lado por irse a trabajar como maestro a
Huércal-Overa, algo que «me tocó así en la vida, pero esto lo siento mío y de todos mis compañeros entrenadores en el club». Piqueras, seleccionador cadete murciano de la generación que en
2024 logró el histórico mejor quinto puesto, ya dirigió a los equipos cadete y junior del Molina Basket campeones regionales en 2017 y 2019. Varios de sus pupilos fueron el sábado héroes del
ascenso. Y, de los 16 jugadores que han participado esta campaña, once se han formado en el club. «Es nuestro mayor orgullo», valora un Piqueras que compara su identidad con la del Gijón,
con el que se jugó el ascenso, y que «solo tenía dos asturianos». UN ASCENSO «DE VERDAD» «Somos verdad», es la frase que más repite un emocionado Joaquín García Box, presidente del Molina
Basket desde hace 37 años, una etapa que comenzó en el extinto ADM que dio paso al actual club. Uno, aquel, que ya compitió en LEB Bronce y hasta disputó fase de ascenso a una LEB Plata que
hoy es la Segunda FEB a la que el equipo molinense ha ascendido. Pero García Box tiene claro que «a aquello no quiero volver». Y recoge el guante de Piqueras. «Nosotros intentamos transmitir
valores, nuestro modelo es de cantera y, el primer equipo, una referencia y un estímulo para nuestros 34 equipos de formación», deja claro un presidente «optimista» en cuanto a conseguir
los apoyos institucionales y económicos para su equipo compita en Segunda FEB. Por eso tiene claro que este Molina competirá de manera muy diferente a aquel ADM. «Habrá que hacer refuerzos,
pero seguirán por lo menos siete jugadores», avanza un presidente que quiere seguir con gente de la casa. Y le da base a su modelo con una anécdota. «Estaba con mi compañero de directiva
Paco Llinares el día de la final y le preguntamos a Juan González cómo estaban ellos». La repuesta de su alero le cautivó: «Tenemos los ojos llenos de luz». No había más que hablar. «Hombre,
¿te va a decir eso un americano? ¡Qué cosa más hermosa!», cuenta aún «con la piel de gallina» García Box. REFERENTE NACIONAL La fase de ascenso de lo de Molina ha sido inmaculada. Y quizás
nadie lo esperaba. Piqueras hasta cree que «Mollet, un equipo muy veterano, no nos respetó del todo». Era el primer día y los murcianos barrieron (67-85). Luego vendrían las victorias ante
El Pinar, «un equipo muy joven y tirador» (63-75) y, por último, la gloria ante el anfitrión Gijón (74-71). Partidos muy diferentes y preparados en tiempo récord por el 'staff' de
Carles Miñana, que también pone en valor a Adrián Contreras, Mariano Cano y Pablo Martínez como un grupo en el que «no hay una dirección al uso, cada uno tiene su parcela, nuestra relación
es muy honesta y no hay nada autoritario», cuenta un técnico que ha vivido «algo en lo que nunca piensas, pero que es mi momento más especial como entrenador». Uno en el que también ha
participado el psicólogo Pepe Aguilar, que tenía una sesión semanal con el grupo que, en esta fase de ascenso, se ha convertido en diaria, y que ha sido una ayuda indispensable «para que los
jugadores pudieran enfocarse en ser competitivos». A través de Juan Carlos Hernández, presidente de la federación murciana, le ha llegado la felicitación de Elisa Aguilar, su homóloga de la
española, «por cómo lo hemos logrado», relata García Box, que presume orgulloso «de lo que inculcamos en el Molina Basket». En un momento así son muchas las personas de las que acordarse.
Cuenta la leyenda que García Box recuerda a cada jugador que ha pasado por su club en casi cuatro décadas de presidencia. Pero pocos, o ninguno, tan especiales para él como Mario Mármol, de
38 años y toda la vida en el club. «No puedo estar más feliz por Mario, siempre ha estado para todo, me lo comí a abrazos y no paraba de decirle cuánto me alegraba por él». Comenta Reporta
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